Conseguir bonos de viaje, también llamados de agencia o Voucher, ofrece numerosas ventajas que cada vez más pasajeros deciden aprovechar. Este documento, expedido por agencias de turismo, aerolíneas o compañías de transporte en general, viene a representar el importe pagado por un billete y otros servicios contratados durante la reserva del mismo. Los bonos dan acceso a múltiples productos turísticos: alojamientos, actividades, tours o aparcamientos en estaciones y aeropuertos, como el parking barato terminal 2 Madrid, entre otros.

 

Desarrollado por el empresario británico Thomas Cook, el bono de viaje desempeña una función informativa para clientes y proveedores. De este documento se emiten tres copias además del original, entregadas a agencias y prestatarios de servicios.

 

Una ventaja inestimable del bono turístico es la posibilidad de ahorrar durante el desarrollo del viaje. Este documento posibilita la reserva de hoteles a precios más asequibles, incluyendo en muchos casos la pensión parcial y completa.

 

Los bonos también pueden emplearse para acceder a servicios y productos turísticos de terceros, como sucede con las reservas hoteleras de Logitravel para viajeros con bonos emitidos por Iberia. De esta manera, los beneficios del bono de viajes pueden tener un amplio alcance.

 

Pero no todos los bonos son iguales. Mientras que (1) los bonos depósitos tienen valor contable e informativo, (2) los bonos de servicios se limitan a informar de los servicios contratados y (3) los bonos de reserva carecen de valor contable y la agencia carece de la obligación de abonar pagos al proveedor. Por último, (4) los bonos de crédito total permiten cubrir la totalidad de los servicios contratados por el cliente.

 

Sin embargo, no es oro todo lo que reluce en los bonos turísticos. Su reducida validez, de sólo 12 meses desde la fecha de emisión, es una limitación molesta que podría condicionar los planes del propietario de este documento. Además, los bonos no son transferibles a otros pasajeros.