Smartphone, el regalo más esperado para muchos jóvenes

Nuestros hijos acceden cada vez más jóvenes a los teléfonos móviles y por eso las Ofertas Telefonos Smartphone son miradas con lupa con los padres a la búsqueda de un teléfono apropiado a la edad y a los fines para los que quieren regalárselo a su hijo. No es lo mismo un teléfono para un niño de 12 años que puede necesitarlo exclusivamente para llamar al salir de una clase de refuerzo que a un chico de 16 que ya se comunicará con más libertad con sus amigos y utilizará una gran cantidad de aplicaciones.

En el caso de los niños de menos edad a los que se les da un teléfono para poder comunicar con los padres en situaciones concretas, siempre es preferible optar por uno de muy baja gama. Incluso por uno que no tenga conexión a Internet y, en caso de que la tenga, contratar un tipo de línea que no permita esa conexión evitando así disgustos porque el pequeño pueda entrar en la red sin un control por parte de un adulto. También es buena idea que el teléfono sea de contrato, de esta manera el padre o la madre verán fácilmente a quién ha llamado su hijo o hija.

En el caso de chicos de más edad, el teléfono ya es algo mucho más complicado de elegir para un padre. Los chicos querrán los modelos más modernos, pondrán de ejemplo a sus amigos e incluso querrán ser los primeros en tener uno mejor para poder presumir del mismo. Pero mientras el chico o chica no sean independientes económicamente o no sean los suficientemente responsables no es buena idea invertir mucho dinero en un aparato que pueden perder, que pueden dañar rápidamente o que podrían robarle en el instituto o en el gimnasio fácilmente debido a su poca experiencia en este terreno.

Si se escoge un smartphone de cierta calidad, algo que seguramente acabaremos haciendo para evitar problemas y discusiones, puede contratarse un seguro ya que uno de los accidentes más frecuentes entre los más jóvenes, y también entre los que no lo son tanto, es la ruptura de la pantalla. Un seguro que garantice el cambio de ésta en caso de ruptura por accidente puede parecer caro, pero nada comparable con lo que nos costará la reparación si no tenemos dicho seguro.