Cuando se acude a comprar colchones y canapes un fallo habitual es pasar mucho tiempo escogiendo el colchón y, cuando llega el momento de comprar el canapé, preguntar al vendedor cuál es el que está de oferta o si le regalan uno al comprar el colchón. Sin embargo, el canapé es muy importante para garantizar un buen descanso.

¿Sabes lo que puede pasar cuando compras un canapé de mala calidad? Estas son solo algunas de las cosas más habituales que podrías sufrir:

-Ruidos durante toda la noche. Al poco de comprar el canapé descubres que cada vez que te mueves, algo cruje en la cama. Al principio es un ruido muy suave, del que no te enteras a no ser que ya estés despierto. Pero, con el tiempo, fácilmente llega a ser un ruido mucho más desagradable y que puede incluso dificultar el sueño.

Esto sucede porque las maderas, o los materiales que componen el canapé, no son de buena calidad y comienzan a ceder y a mostrar desunión. Esto causa los ruidos que, realmente, no tienen forma de arreglarse porque los causa el mismo material.

-Deformaciones en el colchón. Te has gastado un dineral en el colchón y al final este se deforma debido a que el canapé sobre el que reposa es tan malo que ha acabado hundiéndose en alguna zona. El canapé se hunde y el colchón, situado encima, se va adaptando a la forma del canapé al verse sometido al peso del cuerpo. Al final, un verdadero despropósito.

Lo peor es que si esto se prolonga durante un tiempo no solo estarás durmiendo muy mal, sino que el colchón acabará deformándose de manera definitiva y no será recuperable. Piensa en esto antes de comprar cualquier base.

-Roturas en poco tiempo. Quizás lo mejor que te puede ocurrir dentro de lo malo. El canapé cede y acaba rompiendo. Al menos, si lo hace antes de destrozar tu espalda o tu colchón habrás tenido suerte. Pero, desde luego, tocará comprar otro canapé o base tapizada, gasto que habrá que sumar al primero. Y es que, como decía un sabio, demasiado a menudo acabamos gastando dos veces por querer ahorrar.

Un canapé que se rompe puede hacer que tengas que ir rápidamente a comprar otro para no acabar durmiendo directamente sobre el suelo y haya que conformarse con lo que hay en la tienda, sin poder elegir demasiado.